En los últimos años, el teletrabajo se ha impuesto en todas las organizaciones. Pero, por desgracia, estas y sus empleados no son los únicos beneficiados: esta tendencia también abre un mundo de posibilidades para los atacantes.
En los últimos años, el teletrabajo se ha impuesto en todas las organizaciones. Pero, por desgracia, estas y sus empleados no son los únicos beneficiados: esta tendencia también abre un mundo de posibilidades para los atacantes.